RETIRO PREPARATORIO A LA FUNDACIÓN
Los diez primeros Hermanos fueron convocados en Lyon el 23 de septiembre de 1821. Desde el final de la Misión de Saint-Étienne, el Padre Coindre probablemente había tenido contactos con el párroco Rouchon. Y este habría avisado a sus 7 protegidos y organizado el viaje a Lyon. Como lo habían hecho los misioneros algunos meses antes, seguramente tomaron un coche de alquiler que en el trayecto de una jornada les condujo a la subida de la Butte número 3. Fueron calurosamente acogidos por el Padre Coindre en persona, Guillermo Arnaud y Francisco Porchet, que ya estaban en la casa, así como Claude Mélinond, de Belleville, que también había sido convocado. Hay que suponer que algunos jóvenes del taller de caridad, a pesar de que tenían poco trato con sus familias, si es que tenían alguno, fueron invitados a reunirse con familiares o conocidos durante unos días para dejar espacio libre. Los siete recién llegados, todos hombres maduros, se instalaron seguramente en estos lugares que quedaron desocupados. La primera cena en uno de los refectorios debió estar rodeada de un ambiente de alegría y serenidad.